domenica 2 gennaio 2011

S. Francesco di Sales.


La sapienza eterna di Dio ha previsto fin dal principio la croce che Egli ti invia dal profondo del suo cuore come un dono prezioso. Prima di inviartela Egli l’ha contemplata con i suoi occhi onniscenti, l’ha meditata col suo divino intelletto, l’ha esaminata al lume della sua sapiente giustizia. E le ha dato calore stringendola tra le sue braccia amorose, l’ha soppesata con ambo le mani se mai non fosse di un millimetro troppo grande o di un milligrammo troppo greve, poi l’ha benedetta nel suo Nome Santissimo, l’ha cosparsa col balsamo della sua grazia e col profumo del suo conforto. Poi ha guardato ancora a te , al tuo coraggio... perciò la croce viene a te dal cielo, come un saluto del Signore, come un’elemosina del suo misericordioso amore.

El artista de mi propia vida

El artista de mi vida es Dios, Así... un genio... con ideas jamás imaginadas, atrevido a poner los colores, las formas y nuevas texturas, a hacer combinaciones nunca antes vistas.
El artista de mi vida es Dios... con una técnica exacta, preciso, original y auténtico. Es cuidadoso de todos los detalles, pone atención hasta en el más minimo, para limpiarlo, perfeccionarlo, pulirlo.

El artista de mi vida es Dios que ya desde el inicio había hecho boceto de mí mismo, y que conforme su obra iba tomando forma, más se entusiasmaba y cambiaba, corregia, afinaba y retocaba... y era feliz de ver los resultados de su loca creatividad.

Artista es él! y supo transmitir en su obra sus sentimientos, sus ideales, sus colores favoritos, supo poner su alma en la Obra.
 Yo soy la Obra de Dios y al mismo tiempo me ha heredado la tarea de completar la obra... No porque sea imperfecta, sino porque me ama y desea compartir  los méritos de tan espléndida obra de arte.
Y de esta manera... soy yo también artista de mi propia vida. Y soy yo ahora quien con singular técnica debo concluir la obra iniciada por  Dios yendo a lo esencial, a lo simple de Dios, a la idea que tuvo el artista original. Que dificil tarea para un inexperto del arte, sin embargo me ha dado maestros que me enseñan el dificil método della belleza, el doloroso camino del arte... una técnica, una constancia, un duro renunciar a colores, formas que desentonan con la obra. Yo soy el artista ahora y la responsabilidad de aprender el arte y la técnica son mías. Y las nuevas ideas, nuevos estilos, nuevas posturas nuevas combinaciones son creación mía, son propuestas mías. Yo soy el artista de mi propia vida y un verdadero artista, no me dejarán mentir, sabe que la disciplina, la constancia, la renuncia son parte fundamental de la obra.  Quisiera ser ese artista que es capaz de plasmar la belleza de Dios... en sus líneas, es sus notas, en las pinceladas que transforman la más bella realidad. La creación es de Dios, no podría ser de otro modo. Crear! es obra de un grande! la creatividad es obra tuya!